Los niños descubren y desarrollan sus capacidades durante todo el proceso educativo. Al final de cada etapa han vivido experiencias de aprendizaje propias de su edad y estrechamente relacionas con su entorno próximo, que fomentan las ganas de explorar y seguir aprendiendo de forma autónoma, con sus compañeras y compañeros junto a sus familias, junto a otras personas adultas y educadoras, y junto a su comunidad local más próxima. Como resultado final, al acabar esta etapa de educación primaria, se pretende haber consolidado las bases logradas en la etapa infantil, y haber construido conocimientos en su primera alfabetización (lectura, escritura, lenguaje oral, escrito, matemático, corporal y artístico).