Una nueva educación

Una escuela diferente

Una nueva educación

Una escuela diferente

Cualquier transformación educativa descansa en la escuela. Los inspiradores de la nueva educación fueron conscientes de que la escuela es el más poderoso mecanismo para que nadie quede excluido de una participación digna en la sociedad y una herramienta de cohesión y de cambio social. Lo esencial es que ofrezca un ambiente que propicie el bienestar de los estudiantes, para lo que se requiere luz, aire, campo, espacio para jugar, sencillo material escolar. Así se concibieron los fantásticos espacios escolares creados para el Instituto-Escuela.

Adaptar la realidad material de la escuela a su función era y es una prioridad. Lo esencial es que ofrezca un ambiente que propicie el bienestar de los estudiantes, para lo que se requiere luz, aire, campo, sitio para jugar, material escolar sencillo. Así se concibieron los espacios escolares creados para el Instituto-Escuela. Como se trata de aprender en la vida y de la vida, la escuela no debe seguir siendo algo cerrado: hay que derribar sus muros y abrirla al mundo. Las visitas a fábricas, museos, cárceles, hospitales, monumentos, estadios… se convierten en algo esencial. Se aprende en todas partes, todo el tiempo y de todo. Las actividades en la naturaleza, las excursiones al campo, a las ciudades y pueblos, a otros países, no se consideran un mero entretenimiento o una actividad exclusivamente recreativa. Se elimina el libro de texto y se dota a los estudiantes de un instrumento con el que construir y preservar su propio conocimiento: el cuaderno escolar. Los ejemplos de cuadernos que se han conservado son el mejor testimonio de aquella nueva educación en la que el alumno es el autor de su propia instrucción y el creador, a partir de lo que recibe, de sus propios hallazgos. Hoy surgen nuevas formas de aula adaptadas a los usos más diversos, a una educación a la vez personalizada y en colaboración. Los tiempos de la educación también se transforman y flexibilizan, rompiendo el rígido horario de asignaturas y temas. El libro de texto cede el paso a la investigación, la discusión, los proyectos y retos, o el diseño y la elaboración de productos y de artefactos digitales. Cada centro siente la necesidad de disponer de un alto grado de autonomía y participación, que lo convierta en una escuela que aprende, que valora los resultados obtenidos y reorienta su proyecto de acuerdo con ellos.

Selección de fotografías:

Clase del Instituto-Escuela en la Sección Hipódromo, 1933. Fotografía reproducida en la revista Crónica, 29 de enero de 1933.

Niños jugando durante el recreo en el patio escolar del pabellón de la Sección Preparatoria del Instituto-Escuela en los Altos del Hipódromo, 1933. Fotografía de Otto Wunderlich. Col·legi d’Arquitectes de Catalunya (CO AC), Barcelona.

José Luis Benlliure Galán (alumno del Instituto-Escuela), dibujo de una ciudad realizado hacia 1935, cuando tenía siete años. Grafito y lápices de colores sobre papel, 18,5 x 22,8 cm. Fundación Mariano Benlliure.

Profesores y alumnos de las colonias de la Institución Libre de Enseñanza en la playa de San Vicente de la Barquera, Cantabria, verano de 1930. Entre otros, los profesores Manuel Troyano de los Ríos (primero por la izquierda, de pie), Lucía Uceda y José Miranda (tercera y quinto por la izquierda en la primera fila) y Manuel Ontañón, Camino Martí y Luisa Soria (primero, segunda y tercera desde la derecha, de pie). Fundación Francisco Giner de los Ríos, Institución Libre de Enseñanza, Madrid.

Grupo de las colonias de verano del Instituto-Escuela posando en la playa de Llanes (Asturias), verano de 1935. Residencia de Estudiantes, Madrid.

Fotografías del edificio de la Sección Preparatoria del Instituto-Escuela de Segunda Enseñanza de Madrid realizado por Carlos Arniches y Martín Domínguez, hacia 1933. Fotografía de Otto Wunderlich. Col·legi d’Arquitectes de Catalunya (CO AC), Barcelona.

Carlos Arniches y Martín Domínguez, «Instituto-Escuela de Madrid», Nuevas Formas: Revista de Arquitectura y Decoración, año I, núm. 1, enero de 1934. Biblioteca del Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid.

Fernando de Terán, Pradera de la sierra [de Guadarrama], 1951. Óleo sobre lienzo Colección Elena de Terán Bleiberg

Dibujo del jardín de la Fundación Francisco Giner de los Ríos (Institución Libre de Enseñanza), realizado por Teresa Galí-Izard, 2019. Arquitectura Agronomía (Teresa Galí-Izard/Jordi Nebot), Barcelona.

Alumnos del Instituto-Escuela (Sección Hipódromo). Fotografía reproducida en la revista Crónica, 29 de enero de 1933.

Actividad de la colonia de verano de la Institución Libre de Enseñanza con biólogos de la Universidad de Santiago de Compostela en la playa Duvial de San Xoán,Arbo, Pontevedra, verano de 2018. Fundación Francisco Giner de los Ríos, Institución Libre de Enseñanza, Madrid.

Alumnos de tercero de primaria de la Escola del Bosch leyendo Vatge al país dels lacets, de Sebastián Sorribas, 2018. Escola Sant Gregori de Barcelona.