Una nueva educación

Una educación integral

Una nueva educación

Una educación integral

El Instituto-Escuela y otros centros innovadores fueron esos laboratorios de la nueva educación. Su objetivo no era sólo enseñar contenidos, sino formar personas. Contribuir a que los niños y los jóvenes pudieran desarrollar una vida plena con autonomía, iniciativa personal y espíritu crítico, colaborador y solidario.

Para ello esos centros proporcionaban una formación integral, que concernía tanto al cuerpo como al intelecto, a los afectos, al carácter, a la condición moral y a los valores. Una educación física, científica, de la sensibilidad, ética y cívica, en la que se suscitaba el deseo de saber y la capacidad creativa en una esencial continuidad a lo largo de la vida. Partían de la base de que el aprendizaje es básicamente resultado de la experiencia, y que propiciar ésta es la misión de la escuela. Se aprende haciendo y se aprende a hacer. Aprendizaje y práctica son inseparables. En la educación, cuerpo y mente (ejercicio manual intelectual) trabajan juntos. Frente a la metodología tradicional de «estampar» en la memoria conocimientos establecidos, se trata de despertar la curiosidad y el sentido crítico, de experimentar, de enfrentarse con la realidad y con las cosas, de ejercitar «el arte de saber ver», como decía Cossío. Las lecturas, la conversación y el trato familiar con los maestros y entre los estudiantes son también elementos imprescindibles de la nueva educación. Ayudar a construir la autonomía personal y liberar la creatividad de cada estudiante es lo esencial. Y es en el juego —el escenario en el que el niño comienza a indagar y a reconocer la realidad— y en el contacto con la naturaleza y el arte donde fragua su capacidad creativa. Las artes, la música, la pintura, la escultura o el teatro son vías privilegiadas para el aprendizaje, tanto a través del conocimiento y disfrute de las obras de los grandes artistas y del arte popular, como de la práctica de todas las formas de creación. Muchas de estas ideas impregnan también hoy la innovación. Y encontramos en las experiencias del pasado precedentes de las pedagogías emergentes de nuestros días que se basan en la acción y en la apertura de la escuela al mundo y a la sociedad.

Selección de fotografías:

Isabel Fernández-Montesinos, Pavos reales, 2018. Bordado en punto al pasado, punto de nudo, punto de cordoncillo y punto Boulogne realizado con hilos de algodón y aplicaciones de plumas de pavo real sobre batista blanca teñida con piel de cebolla, 50 x 100 cm. Colección Juan Manuel Artero e Isabela Mora, Madrid.

José Moreno Villa, Coupe, livre et carte (pintura cubista), 1927. Óleo sobre cartón. Residencia de Estudiantes, Madrid

Grupo de tercero de la ESO del IES Bovalar (Castellón) recogiendo muestras para el proyecto interdisciplinar «La biología marina en el aula», 2018. IES Bovalar, Castellón.

Cartel de la primera exposición de Picasso en Madrid organizada por ADLAN, 1936 Fundación Francisco Giner de los Ríos, Institución Libre de Enseñanza, Madrid

Modelos de formas cristalográficas, 1934. Instituto-Escuela, Sección Retiro (Cultura). Patrimonio del IES Isabel La Católica, Madrid.

Bruno Vicente (alumno del CEIP Nuestra Señora del Val, Alcalá de Henares), retrato de Picasso realizado en 2019, cuando tenía ocho años. Ceras de colores sobre papel, 21 x 14,5 cm. Colección particular, Madrid.

Alexander Calder en la Residencia de Estudiantes durante su representación de El circo más pequeño del mundo, Madrid, 1 de febrero de 1933. Fotografía publicada en La Vanguardia, 5 de febrero de 1933.

Alumnos del Instituto Escuela (entre ellos Gonzalo Menéndez-Pidal, con cuello marinero) de excursión en Toledo, 1919. Archivo de Gonzalo Menéndez-Pidal, Madrid.

Segundo don de Friedrich Frübel («El mundo en una caja»), edición de Milton Bradley, hacia 1880
Colección Juan Bordes, Madrid

Antonio Ballester Moreno, Sin título (Rojos, azules, verde, amarillo y negro), 2019. Cartulinas de colores sobre papel, 35 x 25 cm. Cortesía de la Galería Maisterravalbuena.

Profesores y alumnos del Instituto-Escuela en en la galería superior del patio del Colegio de San Gregorio, en Valladolid, curso 1925-1926. A la izquierda de la imagen, los profesores Martín Navarro y Francisco Barnés. Residencia de Estudiantes, Madrid.

Dechado de esterilla con guirnalda de flores, abecedarios y cenefas de diversas épocas, 54 x 54 cm. Hacia 1820. Escuela extremeña, Badajoz. Colección del Museo Pedagógico Nacional. Patrimonio histórico Universidad Complutense de Madrid.